Hecho de nuevo.

Hecho de barro, hecho de nuevo.   

  Jeremias 18:1-6

1 Palabra de Jehová que vino a Jeremías, diciendo:2 Levántate y vete a casa del alfarero, y allí te haré oír mis palabras.3 Y descendí a casa del alfarero, y he aquí que él trabajaba sobre la rueda.4 Y la vasija de barro que él hacía se echó a perder en su mano; y volvió y la hizo otra vasija, según le pareció mejor hacerla.5 Entonces vino a mí palabra de Jehová, diciendo:6 ¿No podré yo hacer de vosotros como este alfarero, oh casa de Israel? dice Jehová. He aquí que como el barro en la mano del alfarero, así sois vosotros en mi mano, oh casa de Israel.

La biblia nos compara con vasijas de barro hechas por la mano de Dios que, por cierta situacion de nuestra vida han sido rotas/ modificadas por el pecado  y, este nos ha hecho imperfectos y nos ha separado de la presencia de Dios. 

Todos somos un diferente caso de porque nuestras vasijas estan rotas... unos somos los que pasaron por un divorcio, una adiccion, una enfermedad, un embarazo no planeado, malas decisiones, enojos, peleas, discuciones etc. 

Y hay muchas voces en el mundo que nos dicen que hay que cuidar las apariencias (que somos fuertes, valientes, que podemos solos), porque si no, nuestra vida se derrumbara.

Es por ello que hoy en dia hay muchas personas que se han vuelto masters en cubrir el dolor, abusadores de medicamentos, seguidores de modas y co-participes de la sociedad. Porque no nos hemos dado cuenta que la unica solucion para los quebrantados es... el quebrantamiento

La buena noticia es que Dios toma la los quebrantados, a los sobre-estimados, a los que quedan fuera, a los dañados, los destruidos, modificados, abandonados, y hace lo que solo Él puede hacer. 

Dios ama hacer a lo quebrantado en algo hermoso.

Jeremias 18:4-6 es una hermosa imagen de Dios trabajando en su rueda, mirando a su pieza hechada a perder y, rehusandose a tirarla. El alfarero hace una nueva vasija de varro que "le pareció mejor hacerla". Todo el mismo barro, y las mismas quebraduras, pero hechas nuevas. No hay ninguna chatarra, el arte de las posibilidads de una pieza de barro son infinitas. 

Mi oracion es, "Dios, toma mis piezas rotas y remoldealas en lo que te parezca mejor".